El fin de
semana pasado me quede de nuevo en Puebla; el sábado por la tarde fuimos al Centro
Cultural de la BUAP y el domingo nos fuimos a Xalapa.
El sábado, después de estar por la mañana en el departamento en tareas puramente
domésticas, por la tarde me fui con Pati, su Albert y la Dina a dar
una vuelta por la ciudad. Primero fuimos a una “plaza”, que es como llaman aca
a los centros comerciales compuestos por diversas tiendas que es un poco más pequeño que un
centro comercial típico. Desde el exterior de la “plaza” tome unas fotos de
unos vendedores de flores en los cruces de las calles, en los que se suelen
situar payasos, vendedores, limpia cristales…….
Después nos
acercamos al Centro Cultural de la BUAP (mi Universidad aca), la verdad es que
es un centro muy contemporáneo y, teniendo en cuenta su ubicación y composición parece que te trasladas a otra ciudad. Se
ubica en “Angelópolis”, que es la nueva zona de equipamientos comerciales,
lúdicos y educativos de Puebla. En el Centro Cultural se desarrollan los actos
públicos de la Universidad (como la entrega de diplomas), así como todas
aquellas actividades vinculadas con la cultura (danza, música, pintura….).
Fuimos a ver una exposición de Jorge Marín, un pintor y escultor mexicano. La
exposición se denomina “El cuerpo como paisaje”, que se compone de esculturas
donde destacan las alas, máscaras, caballos y acróbatas; en el que el juego con
la gravedad esta muy presente. Os adjunto una de las imágenes que pude tomar en
la exposición.
En el
patio del Centro también existe una exposición titulada “Live”, que se compone
de unos corazones de múltiples colores y composiciones.
Uno de
los corazones con más referencias mexicanas era el que estaba pintado de
chiles, que al ser pura pintura nos atrevimos a intentar darle un bocado en
grupo.
Cuando ya
llevas un tiempo aca es fácil repetir lugares, sobre todo en el
entorno de la ciudad donde resides. Ya lo hice con Oaxaca y el pasado domingo
fui de nuevo a Xalapa, mi primera escapada cuando llegue. Realmente habíamos
planeado una excursión a Taxco, que nos habían comentado que es una ciudad
preciosa al sur del DF, pero a Pati y Albert les surgió un pequeño problema y
tuvieron que ir a Xalapa a arreglar unos asuntos, y como son ellos los que
disponen de “carro” pues todos a Xalapa de nuevo. Tienen un restaurante en
Xalapa que se llama Las Carnitas, si alguien visita la ciudad os lo recomiendo
ya que se come muy muy bien. Salimos muy temprano de Puebla y después de un
viaje de un poco más de dos horas llegamos y desayunamos en Las Carnitas, yo me
tome unos huevos a la mexicana que me sentaron muy bien. Os muestro una imagen de Pati en la puerta de su restaurante invitándonos a entrar.
Después
del desayuno nos marchamos de excursión a un par de pueblos que están muy
cerquita. Primero llegamos a Coatepec, un pequeño pueblo de montaña que es
conocido por que produce un café de mucha calidad. Cuando vas paseando por el
pueblo de vez en cuando llega un olor a café molido muy agradable. Dimos un
paseo por la ciudad, de la que me impresionaron los aleros de madera de las
cubiertas, que tienen un ancho de un metro y medio aproximadamente y sirven
para proteger de las frecuentes lluvias. La plaza estaba muy animada y la
música nos hizo lanzarnos a mi primer, y corto, baile público en México, nos
marcamos unos pasos de una especie de pasodoble.
De hay
nos marchamos a Xico, que es otro maravilloso pueblo de montaña en el que se
encuentra la cascada de Texolo, de 80 metros de altura, y la Cascada de la
Monja, que aunque más chiquita permite bañarte casi debajo de ella. La verdad
es que los que estaban allá, mexicanos en su totalidad, no se bañaban pese al
calor que hacía, sólo se sentaban en las piedras a ver la catarata. Lo primero
que sorprende es que no llevan bañador y los que se atreven a bañarse lo hacen
con la ropa y en zonas que no cubre. Yo no me pude contener y me bañe “a la
europea”, con mi bañador y disfrute del agua fresquita y de un entorno único.
Este
lunes he estado en Tlaxcala con Octavio, uno de los alumnos del Doctorado, que
al ser de esa ciudad se ofreció a mostrarme su ciudad. Ha sido una visita muy
agradable, es un placer disfrutar de las explicaciones y detalles de como
alguien al que le apasiona su ciudad te la muestra, sus rincones, sus
recuerdos… Ya os daré los detalles de esta reciente visita.
De momento termino con la foto de mi baño en la Catarata de La Monja.